Un sistema redondo

Los sistemas de sujeción de punto cero de AMF reducen los procesos de equipamiento de 9 a 3

Para el fabricante alemán de laminadoras, la rapidez y flexibilidad son enormemente importantes. Las laminadoras permiten laminar a sus clientes, por ejemplo, material redondo con un diámetro de 160 mm a 40 mm. Además, el fabricante está construyendo laminadoras de estiraje y reducción de 3 rodillos, para fabricar tubos sin costuras y tubos soldados. Como esto suele requerir un mecanizado intensivo, la fabricación de repuestos a menudo debía hacer cola durante mucho tiempo. En el marco de la optimización de la producción se ha implementado ahora en tres centros de mecanizado la técnica de sujeción de punto cero de AMF. De repente, ahora todo funciona mucho mejor y más rápido.

Una flexibilidad que solo conoce un ganador

Por un lado se ha reducido drásticamente el número de procesos de equipamiento para fabricar complejas excéntricas, ejes, tapas y otros componentes para laminadoras. En casos extremos, ahora solo se requieren tres sujeciones, en lugar de las nueve necesarias en el pasado. Por otro lado, los tiempos de equipamiento para cada equipamiento individual se han reducido en torno al 90%. Además, podemos realizar el preequipamiento fuera de las máquinas. Estas son las ventajas que los sistemas de sujeción de punto cero de AMF ofrecen a los usuarios. Pero a esto hay que añadir un efecto adicional.

Los tiempos de mecanizado de piezas exigentes para las complejas laminadoras son bastante intensivos, llegando a durar a veces hasta tres horas. En el pasado, la fabricación rápida y a corto plazo de repuestos solicitados conllevaba un esfuerzo considerable. En la actualidad este tipo de encargos, tan urgentes para los clientes, pueden intercalarse fácilmente. Y el proceso se realiza entonces de forma flexible y rapidísima:

- El mecanizado de la pieza actual se interrumpe,
- la pieza de repuesto se coloca en el punto cero para su mecanizado,
- la pieza de repuesto se fabrica,
- la pieza de repuesto se libera,
- la pieza original se fija nuevamente,
- se termina de mecanizar la pieza original

Gracias a la técnica de punto cero no es necesario realizar una nueva medición. La mecanización se reanuda exactamente en el mismo punto en que se interrumpió. Esta flexibilidad solo tiene un ganador. El fabricante, porque puede suministrar más rápidamente, y porque puede reanudar más rápidamente su producción. Y AMF, porque el cliente a buen seguro repetirá.

Al ser el módulo K-20 de AMF también compatible con la mecanización mediante fresado-torneado hasta 2200 r.p.m., esta es la solución preferida. Se compone de una placa base de 48mm de altura con cuatro módulos K20 de sujeción de punto cero de AMF. Éstos desarrollan fuerzas de entrada y cierre de 20kN respectivamente y fuerzas de sujeción de 55kN respectivamente. La precisión de repetición en los procesos de sujeción es inferior a 0,005mm. Con un diámetro de 112mm respectivamente y piezas de apoyo biseladas adicionales en la estación, el sistema ofrece una gran superficie de apoyo. Además, con una profundidad de montaje de 34mm, los módulos son muy compactos y requieren una altura de montaje muy baja en la mesa de la máquina.

Un semáforo para mayor seguridad

Para abrir los módulos de sujeción se emplea un grupo hidráulico convencional. Para los procesos de fresado-torneado, el sistema cuenta adicionalmente con controles y un semáforo de fácil lectura. Este indica el estado de sujeción de la estación de sujeción y autoriza la pieza para su mecanización. Además del ahorro de tiempo de preparación que ello supone, también se reducen las fuentes de fallos, inherentes a cada proceso de fijación.